viernes, 5 de abril de 2013

Malos tiempos para la construcción


Solo hay que salir a la calle para ver cómo está el sector de la construcción, miles de obras paralizadas, grúas abandonadas, materiales tirados en los solares, vallas de protección por el suelo, calles sin urbanizar, lugares en los que parece que el mundo ha llegado a su fin.

En las colas del paro se reúnen grupos de personas que comentan las construcciones que han realizado, los ladrillos que han puesto, las farolas, las aceras, las chapuzas, y de eso se quejan, de que ya no pueden hacer ni chapuzas.

Según la Federación de Construcción Madera y Afines (Fecoma), el sector de la construcción puede acabar el ejercicio 2013 con menos de 600.000 empleados en toda España por el parón que registra esta actividad, lo que arroja un ajuste del 68% desde el máximo de 1,9 millones de empleados con que llegó a contar antes de la crisis, en los años del “boom”.

Para atajar esta tendencia, Fecoma pide inversión en obra pública y facilitar crédito para la rehabilitación de viviendas a través de la banca nacionalizada.

El secretario general estatal de Fecoma ha explicado que sólo en lo que va de año se ha perdido el 5% de los trabajadores, una rebaja que en todo 2012 fue del 20%.

También indicó que en el área de la madera había 350.000 empleos en 2007 y en estos momentos son 169.000 trabajadores, mientras que en el de los materiales llegó a haber 250.000 trabajadores, y en la actualidad no se llega ni a 100.000.

Si hacemos caso a estos datos y a las previsiones, el sector de la construcción no tiene un futuro muy halagüeño en España, si bien las grandes empresas constructoras están tomando posiciones en otros países. En el nuestro se está a la espera de que se invierta en obra pública, ya sea en infraestructuras o vivienda social y en la rehabilitación, y si no al paro.