El jueves 9 de mayo , en la entrada Becas de la Fundación José Manuel Entrecanales, hablaba de que la Fundación José
Manuel Entrecanales ofrece prácticas remuneradas en start-ups. Varias personas
me han preguntado sobre este tipo de empresas y voy a intentar explicarlo.
Una start-up se
diferencia de las empresas tradicionales en que son empresas pequeñas o medianas
de reciente creación, delimitadas en el tiempo, y muy relacionadas con el mundo
tecnológico. Una start-up parte de una idea de negocio innovadora y con el
conocimiento de uno o más socios, generalmente pocos, para tratar de escalar
esa pequeña idea hasta convertirse en un rentable negocio.
Delimitadas
en el tiempo
Generalmente tratan
de explotar nichos de mercado con un potencial alto pero delimitado en el
tiempo. Si el negocio prospera, suelen ser compradas por otras más grandes, en
el caso contrario suelen desaparecer. La mayoría no suele superar los dos años.
Profesionales
especializados
Al contrario de otras
empresas, la start-up cuenta con varios profesionales especializados cada uno
en su sector (producción, marketing, investigación, etc.) y con una capacidad
muy grande de cambio y adaptación al mercado.
Inversiones
No suelen ser necesarias
grandes inversiones, pero sí se pueden obtener importantes beneficios en los
primeros años. Las start-up con éxito atraen a muchos inversores particulares que
colocan capital propio de forma directa.
Este tipo de negocios
suelen utilizar Internet como una de sus principales herramientas para darse a
conocer y, en muchas ocasiones, también para vender el producto.